Arrancó el campeonato, pero en Manizales todo parece seguir igual. En el debut por la fecha 1 de la Liga, Once Caldas fue superado 1-3 por Atlético Nacional en el Estadio Palogrande, dejando una imagen preocupante que no dista en nada de la del semestre anterior. Ni el inicio del torneo logró renovar el ánimo de un equipo que volvió a ofrecer un espectáculo desordenado, sin ideas ni carácter.
A los 13 minutos, Joan Castro puso el 0-1 tras una defensa que marcó con la mirada. El tanto fue un reflejo de un Once Caldas pasivo, lento en los relevos y sin intensidad. Nacional, sin ser brillante, fue contundente ante un equipo que no presiona, no propone y no responde.
Apenas comenzaba el segundo tiempo cuando Alfredo Morelos, libre de marca, firmó el 0-2 al minuto 48. La reacción llegó por la vía del penalti que Dayro Moreno convirtió al minuto 60’. El delantero sigue siendo el único faro ofensivo en medio de un equipo a oscuras.
Pero la esperanza duró poco. Al 69’, Iván Rojas anotó en propia puerta en un blooper defensivo que sintetiza el caos: nervios, mala comunicación y cero confianza. Nacional, con oficio, manejó el resultado ante un Once Caldas predecible, sin ideas ni rebeldía.
Era la fecha 1, el momento para ilusionar, para mostrar algo distinto. Pero lo que se vio fue la repetición del libreto que ya todos conocen: errores individuales, bajo nivel colectivo y un cuerpo técnico con ideas muy poco claras. Preocupa que aún con algunas caras nuevas, la identidad siga ausente.